TARTA DE ALMENDRAS

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Bueno.. al fín publicando... parece que ya se han resuelto los problemas de Blogger después de mas de 20 horas viendo esta cocina en modo lectura... supongo que tras el pánico, los blogueros habremos batido el record de copias de seguridad de nuestros espacios a lo largo de estas últimas horas.

Si tienes un blog y todavía nos has guardado un backup del mismo ya estás revisando este enlace antes de que te lleves un susto mayor.

Su explicación oficial aquí,  ahora toca recuperar algunos de los datos y comentarios perdidos :(

Para pasar el mal trago -todo fuera como esto por desgracia hay cosas realmente graves- me he saltado las últimas recetas ligeras y vengo con algo delicioso. Sonia me animó a prepararla la primera vez y de verdad que desde entoces es un éxito rotundo.

Ingredientes:

Para la cobertura:

150 gr. almendras crudas

130 gr. mantequilla

100 gr. azúcar

50 gr. agua

Para el bizcocho:

150 gr. azúcar

3 huevos

200 gr. nata líquida

200 gr. harina de repostería

1 sobre de levadura química

Un pellizco de sal

Para la decoración:

50 gr. azúcar glasé

Preparación thermomix:

• Glaseamos los 50 gr. de azúcar para la decoración final y reservar.
• Precalentamos el horno a 180º.
• Ponemos las almendras en el vaso programando 4 segundos, velocidad 4. No deben quedar muy trituradas. Las reservamos en un cuenco grande.
• Introducir en el vaso la mantequilla, el azúcar y el agua programando 5 minutos, 90ºC y velocidad 2. 
• Vertemos esta preparación sobre las almendras y reservamos.
• Sin lavar el vaso, colocamos la mariposa en las cuchillas y añadimos el azúcar y los huevos. 
• Programamos 4 minutos a 37ºC  y velocidad 4 y 5 minutos más a la misma velocidad sin temperatura.  
• Tamizar la harina con la levadura y añadirle la sal, incorporar la nata y programar 10 segundos a velocidad 2.
• Terminamos de mezclar con la ayúda de la espátula.
• Vertemos la mezcla en un molde desmontable engrasado y enharinado e introducimos en el horno precalentado durante unos 25 minutos.
• Desmoldamos el bizcocho y extendemos por encima la cobertura para introducirlo 10 minutos más en el horno a la misma temperatura. Dejamos enfriar la tarta sobre una rejilla y espolvoreamos con azúcar glasé antes de servir.

Preparación tradicional:

• Precalentamos el horno a 180º.
• Triturar las almendras dentro de una bolsa pasando el rodillo y picar con el cuchillo ligeramente. No deben quedar muy trituradas. Las reservamos en un cuenco grande.
• En un cazo disolvemos al fuego la mantequilla de la cobertura con el azúcar y el agua.
• Vierte esta preparación sobre las almendras y reserva.
• Blanqueamos el azúcar y los huevos. 
• Tamizar la harina con la levadura y añadirle la sal, incorporar la nata y mezclar.
• Vertemos la mezcla en un molde desmontable engrasado y enharinado e introducimos en el horno precalentado durante unos 25 minutos.
• Desmoldamos el bizcocho y extendemos por encima la cobertura para introducirlo 10 minutos más en el horno a la misma temperatura.
• Dejamos enfriar la tarta sobre una rejilla y espolvoreamos con azúcar glasé antes de servir.

A la hora de repartir el glaseado yo no desmoldo el bizcocho, coloco el molde desmontable sobre una bandeja (de hornear pizza por ejemplo) y ahueco ligeramente para que la cobertura empape la superficie.
Incluso sin este paso, poniendo el glaseado directamente sobre la superficie del molde tal cual, queda muy bien y me parece mucho más cómodo.

Como veis el aspecto antes incluso de espolverarla con azúcar es de lo más tentador.
La cobertura de almendras con el glaseado es realmente deliciosa, no os importe si el molde es un poco mas grande y queda mas plana pero no escatimeis a la hora de cubrirla.
 
Podemos prepararla también en un molde rectangular y cortar pequeñas porciones que colocaremos sobre cápsulas de papel, se convertirán en el acompañamiento perfecto para un café con amigos.

Tenemos una tarde lluviosa en esta zona del Moncayo... de esas que invitan a remolonear en el sillón con un libro en la mano.

Os dejo con la primera frase del que acabo de empezar: El bolígrafo del gel verde de Eloy Moreno, no sé si está bien o mal pero con este principio desde luego promete.

"Una vida -cualquiera- se resume en una serie de acontecimientos especiales, de puntos y aparte. Puntos que, por más tiempo que transcurra, permanecen intactos en la memoría, remanentes hasta el mismo día que en que nos alcanza la muerte".

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